DEJA QUE MIENTAN

Mateo 5:11 Bienaventurados sois vosotros cuando os vituperaren, y os persiguieren, y dijeren de vosotros toda suerte de mal, por mi causa, mintiendo.

Existe el concepto de que cada persona que se acerca a Cristo para entregarle su vida, automáticamente se vuelve una persona feliz, sin más problemas, sin más dolores ni enfermedades, sin más padecimientos, pero lastimosamente cuando alguien se acerca a Cristo esperando una vida paradisiaca en la tierra, al poco tiempo se frustra al darse cuenta que aquella vida 100% feliz, no era otra cosa que una utopía, una mentira que jamás existió. Con esto no estoy diciendo que Cristo no nos alegre la vida, tampoco que ser cristiano sea un sinónimo de infelicidad, yo creo (por que lo he vivido) que el hombre es realmente feliz y vive una vida de gozo pleno cuando logra una comunión continua con Jesucristo, pero esa felicidad y ese gozo difieren en mucho (por no decir en todo) del concepto que el mundo tiene respecto de gozo y felicidad.
Este hecho es el culpable de muchas deserciones en las filas de la milicia cristiana, por que aquella “promesa” de una vida feliz (en términos mundanos) al no cumplirse, trae decepción y desdicha al corazón, y el “cristiano” que pensaba que el problema de su vida había sido resuelto como casi por acto de magia, se ve frustrado al percatarse que su problema sigue allí, y más terrible es ahora, al darse cuenta que no puede evadirse de su problema (tabaco, drogas, alcohol) como lo hacia antes.
Sin duda la vida cristiana es hermosa, sobre todo cuando logramos despojarnos de la basura y de los conceptos que traíamos del mundo, y por consecuencia de esto le entregamos nuestro entendimiento y voluntad a Cristo, es allí donde comenzamos a disfrutar de aquel gozo que sobrepasa todo entendimiento, es decir, el problema sigue, pero ahora el gozo de Cristo que es mayor que la razón, llena mi corazón y me da esperanza en saber que todas las cosas a los que aman a Dios, les ayudan a bien.
Lo más maravilloso de tener una vida donde reina Jesucristo es saber que ya sea que vivamos o que muramos, mientras estemos en Cristo, nada nos puede amedrentar, por que nuestro gozo no es sostenido por un falso y momentáneo sentimiento humano, sino por el poder del Dios todopoderoso que creo todo lo que hoy existe, y si a ese precioso creador, con todo ese poder le plació vivir dentro de mí, ¿que más en la vida pudiera yo querer? ¡¡Bendito Señor, enséñanos a valorarte por lo que eres, y a no rechazarte cuando no nos concedes lo que nuestro egoísta corazón quiere!!

Hace unos meses atrás, pasando por la plaza Almagro, escuche a un apasionado predicador decir lo siguiente:
¡¡Acércate a Jesús, si no tienes trabajo, el te proveerá de uno, si estas enfermo, el te sanara, si tienes problemas acércate al Señor y el te solucionara tus problemas!!… a buenas y a primeras podríamos entender que Jesucristo, según las escrituras, tiene poder para hacer todo eso y mucho más, el te puede proveer de un buen trabajo (y lo hace), te puede sanar (y lo hace), y si estas en medio de cualquier problema que parezca imposible para ti resolver, Dios es Dios de lo imposible, el puede resolver cualquier problema, que humanamente parecía imposible de solucionar.
Todo esto es verdad, pero no es menos verdad que también existen cristianos que pasan por crisis económicas, o que oran y oran por ser sanados de cierta enfermedad y no son sanos e incluso mueren por causa de esa enfermedad, como también los cristianos tienen problemas de toda índole y que muchas veces la solución no es otorgada por el Señor, al menos no inmediatamente. Quiero explicar con esto, que desgraciadamente muchos predicadores movidos por el afán de traer las almas a Cristo, dicen verdades a medias, tales como que si recibes a Cristo en tu corazón, ya eres salvo ¿perdón, pero, no hay que arrepentirse de los pecados primero y luego entregarle la vida y la voluntad a Cristo y luego de eso el Señor nos da el don de su salvación?, pues claramente el evangelio se tergiversa por el interés de traer un alma a los pies de Cristo, y en base a ese mismo interés envolvemos con cebo el verdadero mensaje del evangelio, reduciéndolo a una media verdad que al fin y al cabo es también una media mentira.
Lo tragicómico de esto, es que a la gente se le engatusa diciéndole que Jesús le hará feliz, pero una vez que se dan cuenta que sus problemas siguen igual y quizás peores que antes, y que la anhelada felicidad no llega por parte de Jesús, entonces la misma gente que hizo la confesión de fe creyendo que Jesús era la solución a todas sus dificultades, se enoja con Dios y le tilda de mentiroso, y en vez de añadir un creyente más a las filas de los salvos, estos “predicadores” vacunan a la gente contra la verdad del evangelio.

Insisto que no digo que Jesús no tenga el poder ni quiera hacernos felices, sino todo lo contrario, el tiene el poder y quiere hacernos felices, pero en sus términos no en los nuestros.

Ahora bien, gracias al cielo que si existen personas que han recibido el mensaje correcto y que además han aceptado que Cristo es quién hace pleno al hombre, y se han dado cuenta que Jesús no vino al mundo a hacer felices a los hombres en términos mundanos, sino que vino a darnos vida con abundancia en el corazón, con gozo en saber que aunque hoy no haya nada en la mesa, él de alguna manera proveerá, por que es fiel aún cuando nosotros somos infieles ¡¡Gloria a Dios por ello!!

El camino del evangelio no es fácil, todos en algún momento hemos pensado en retroceder, todos hemos sido tentados a hacer las cosas bajo nuestros términos y quitarle la gloria a Dios, todos en algún momento, aunque sea por solo un instante, hemos dudado de la fidelidad de Dios, pero no por que necesariamente queramos hacerlo, sino por que las circunstancias de la vida, a momentos llegan a ser tan adversas que sin duda la humanidad que arrastramos nos llena de una cordura diabólica el corazón, y el diablo al igual que en el edén frente a Eva, nos dice ¡¡así que Dios os ha dicho que…!! Somos humanos y hay que reconocer que en muchas áreas somos débiles, muy débiles, tanto que si no fuera que él prometió guardarnos sin caía, todos los cristianos, desde el menos consagrado al más espiritual, pasaríamos en el suelo por causa de nuestra debilidad.
Es por ello que hoy aún existen mártires, inclusive en países donde el cristianismo no es perseguido, pero espiritualmente hay una persecución constante, una lucha que no da tregua, comienza con la televisión y sus promiscuos programas, seguido por nuestros trabajos que están llenos de inmundicia, grosería, fornicación y lascivia, y finalmente por una sociedad que tiene un corazón duro y rechaza la santidad y el amor de Dios, realmente hay que ser muy astuto para no caer en las trampas del mundo, trampas que muchas veces se disfrazan de bondad, de cosas buenas o de buenas intenciones, y hay que ser valiente para cerrar los ojos y el corazón a la maldad, y para mantenerlos abiertos a la santidad y a la fidelidad de Dios, en definitiva aquellas cosas nos obligan a morir, este mundo nos deja solo una alternativa, MORIR A ÉL Y A SUS DELEITES, y por ende cada día depende de nosotros ser mártires espirituales, o ser traidores de la causa de Cristo, los términos medio son nauseabundos para el Señor.

Por todo ello la vida cristiana es para valientes, por que no bastando con el ataque el mismo diablo lidera a través de la influencia del mundo y la sociedad, si el mundo ve que uno no cede a su concupiscencia, comienza atacarnos a vituperarnos, maldecirnos y hablar mal de nosotros diciendo mentiras ¿cuantos cristianos son acusados falsamente en sus trabajos por el solo hecho de que hacen obra de evangelista?, otros son menospreciados por sus vecinos por no participar en borracheras, a otros tergiversan sus dichos con el fin de dejarlos mal frente a los demás, todo esto lo hace el diablo por que sabe que el testimonio de Jesús en nosotros es muy importante, ya que de alguna forma cuando es enlodada la imagen de un hijo de Dios, su Padre también es enlodado. Aunque es triste todo esto, nadie puede decir que Jesús no lo profetizo, para nosotros no debe ser nuevo que el cristianismo no es fácil, que incluso quién decide dejar el mundo por que allí tenia problemas, muchas veces en Cristo sus problemas se empeoran o se multiplican, claro que si o ¿piensan que el diablo soltara un alma sin luchar por ella? Es aquí donde debemos recordar lo siguiente ¡¡Pero confiad, yo he vencido al mundo!!
Es triste cuando la familia se opone a tu cristianismo, es triste cuando se encargan de recordarte lo vil que fuiste cuando no eras cristiano, es penoso darnos cuenta cuan ruines fuimos por no haber conocido la luz de Cristo, pero con todo lo deprimente que puede ser recordar nuestra vida pasada, no tiene comparación (con problemas y todo) el vivir la nueva vida que Jesús nos entrega, y aunque hablen mal de nosotros, aunque nos vituperen, aunque nos rechacen, nos humillen y digan muchas cosas contra de nosotros mintiendo, el sentir el amor de Dios en nuestro corazón no tiene comparación, su abrazo y su presencia son mucho más deleitables y confortables que cualquier deleite mundano, y aún con problemas, el saber que el cielo nos espera nos da esperanza para seguir siendo mejores para el Señor, a pesar de la oposición del mundo. De todas maneras nuestro sentir debe estar pegado a la verdad de Dios, es decir, no importa que hablen mal de nosotros mintiendo, lo importante es que cuando lo hagan, todo lo que digan sea mentira.

Ahora bien ¿Cuántas veces han oído esto? ¡¡Que si mi hermano(a) es un hipócrita, se llena la boca con Dios, y el fin de semana se vuelve loco tomando!! O ¡¡Mi cuñada es una farsante, se pasa toda la semana en la iglesia, pero va a puro pelar, usa unas faldas tan largas como su lengua!! O ¡¡ahora que mi hijo es canuto ya ni me saluda por que dice que soy pecador, pero es pura farsa, es para no pagarme lo que me debe!!, estos son solo ejemplos de aquellas cosas que se hablan, de ti o de mi, o de cualquier hermano en la fe, y aunque son fuertes las declaraciones, en si no hay problema en ellas mientras sean mentiras, pero ¿todo aquello que hablan de nosotros los evangélicos es mentira?.

La biblia dice que se llenaran la boca con nosotros, que nos llevaran como ovejas al matadero, y es así como muchos incluyendo a Cristo mismo, murieron, falsamente acusados de herejía y blasfemia, pero ¿Cuántas herejías dijo Jesús? Ninguna, y ¿Cuántas blasfemias dijo esteban? Ni una sola, sin embargo, a ambos los mataron por decir la verdad y uno de ellos es el que esta sentado a la diestra de Dios Padre, y el otro vio esa imagen antes de morir ¿pero como sus muertes fueron gloriosas si eran blasfemos y herejes? Pues por que cada una de las cosas con las cuales les vituperaron y acusaron, eran MENTIRAS.
¿Somos nosotros como ellos? ¿Cuándo hablan mal de nosotros lo hacen con mentiras? Gloria a Dios si es así, por que mayor peso de gloria adquirimos cuando por su causa somos humillados y acusados falsamente, pero considero que muchas de las acusaciones que tiene hoy la sociedad Chilena contra el pueblo evangélico, son netamente verdad, si no me creen, ¿a que se dedico el canal vida visión cuando estuvo por señal abierta? A PEDIR DINERO, ¿Cuál es la imagen que tomo la sociedad chilena por causa de aquello? Pues que todos los pastores evangélicos a lo único que se dedican es a pedir plata, ¿a que se dedica el canal enlace TBN a parte de solicitar ofrendas? A hacer shows de “sanidad” (mal llamadas campañas) y ¿Qué imagen tomo la sociedad al ver eso? De que todos los pastores son unos showman, y que hacen parafernalia de los sus seudos poderes sanadores, perdón pero ¿que les hace mejor que Yolanda Sultana (guardando la proporciones)? lo triste de esto es ¿hablan mal de los evangélicos, diciendo mentiras? No importa que la sociedad tenga una mala imagen del evangelio por causa de que el diablo les mienta en sus conciencias, lo que si importa es que nosotros como cristianos estemos preocupados de que esos dichos sean mentiras, y para que lo sean, somos nosotros los que tenemos el deber de guardar el testimonio de Cristo en nosotros, es nuestro deber que la gente vea en nosotros la imagen del hijo de Dios, y no a un farsante que solo utiliza como una pantalla el evangelio para hacer sus fechorías encubiertamente.

El testimonio para Jesús siempre fue primordial, por ello el siempre vivió en santidad, por que amaba entragañablemente al Padre y por que sabia que si su vida no era un ejemplo, en poco y nada hubiera podido influenciar las vidas de los de que le seguían.

Amado hermano, no importa que hablen mal de ti, es más Dios nos hace ver que las cosas las estamos haciendo bien, que verdaderamente estamos avanzando cuando un montón de perros comienza a ladrarnos a la orilla del camino, no hay ningún problema cuando se juntan a planear nuestro mal o cuando nos acusan falsamente, por que si lo hicieron con Cristo ¿Cuánto más con nosotros?, el problema radica cuando la gente habla mal de nuestro mal proceder, pero en ello no mienten, es decir, cuando nos vituperan y nos acusan de cosas que realmente hemos hecho mal, en ese momento, cuando nos hemos deleitado en el mal y la gente que nos rodea se percata de nuestro pecado, es cuando comenzamos a vivir hipócritamente, y la profecía no se cumple en nosotros, por que si bien hablan toda suerte de mal contra nosotros, pero esta vez lo hacen DICIENDO LA VERDAD. Que vergüenza debe sentir Dios cuando de los cielos ve que nos acusan por un pecado que si cometemos, y que al igual que David al encubrir su pecado, hacemos que los enemigos de Jehová blasfemen contra su nombre.

Este es un llamado a la santidad y a la valentía, seguir a Cristo tiene un precio, y ese es la muerte, no tan solo la de él, sino la nuestra cada día en nuestra propia cruz, y cuando la gente ve en nosotros la valentía con la que nos clavamos en ese madero cada día, el diablo los usara para acusarnos de alguna u otra mentira, y gloria a Dios por ello, por que en el momento que hacemos al enemigo moverse de su escritorio, es cuando nos podemos percatar que nuestra manera de vivir esta haciendo mucho más daño al reino de las tinieblas, que nuestras simple palabras. El evangelio es difícil, de alguna u otra forma nos cuesta la vida (aunque no literalmente) y si te dijeron que Cristo vino para hacerte feliz en esta tierra, es mejor que estimes desde ya que sus parámetros de felicidad superan con creces a los parámetros del mundo, por lo tanto, síguelo, ámalo, entrégale tu vida, pero también te digo, paga el precio por todo ello, te vituperaran, y otras veces te ridiculizaran, y otras más hablaran de ti con mentiras, pero lo importante no es esto, sino que cuando lo hagan tengas en claro que Cristo vale eso y mucho más, y que cuando hablen mal de ti, lo hagan mintiendo y no basados en algún pecado que hoy cometes.

Hermano (a) se fiel hasta la muerte, por que te espera la corona de la vida.

Dios te bendiga,

Profeta de Dios.