10 nov 2009 |

¿Qué tan bueno puede ser lo malo?


Romanos 8:28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.

Muchos de nosotros, durante nuestro trayecto en este angosto caminar, hemos tenido alguna prueba, unos más que otros quizás, pero cual más cual menos, todos hemos pasado por un momento donde estamos en medio de la barca de la vida, “solos” y en la mitad de la tormenta más indómita que hasta ese momento habíamos visto.
En ese momento, en la búsqueda de una palabra de aliento que nos sirva de socorro, es cuando alguien iluminadamente nos dice, “hermano, recuerda que todas las cosas nos ayudan a bien”, y nuestro dolor causado por la vertiginosa prueba comienza a tomar sentido. El problema no son las pruebas en si, no son las dificultades, sino más bien, que de bueno nos traerá ese momento fatal que estamos viviendo.
Muchos de nosotros no podemos ver nada bueno en algo malo, y claramente el Libro de Romanos nos dice que TODAS las cosas nos ayudan a bien, desde el anhelado y siempre bien esperado aumento de sueldo, hasta la perdida de ese buen trabajo, desde el nacimiento de un muy esperado hijo, hasta la muerte del mismo, desde la adquisición de esa preciosa casa que con tanto esfuerzo adquiriste, hasta el incendio que la convirtió en cenizas,TODO en esta vida te ayuda a bien.
La pregunta es la siguiente ¿a quienes es lo que TODO les ayuda a bien? ¿a todo aquel que dice creer en Dios? ¿a todo aquel que va a la iglesia? ¿a toda buena persona? ¿a todo el que da los diezmos y las ofrendas? ¿a todo cristiano?, la respuesta a esa pregunta es, A TODO AQUEL QUE AMA A DIOS, TODAS LAS COSAS LES AYUDAN A BIEN.
El amor es una de las cosas más hermosas que en la vida del hombre han podido existir, y hablo del amor verdadero, no de aquel afecto natural que siente el humano egoístamente, sino del amor que proviene de la fuente correcta, el amor que proviene de Dios. Hablar sobre el amor es algo muy profundo, por lo que en este mensaje solo me tomare de lo más característico del amor, LA DESICIÓN.
Dios decidió amar al mundo, de tal manera que lo demostró entregando a su precioso hijo en perdón por los pecados de la humanidad. Jesús es la expresión más clara del amor en toda la historia, nadie puede amar tanto como para entregar a su hijo como sacrificio en pos de millones de personas que no expresan el mínimo de cariño o aprecio por ese hijo.
Jesús nunca en los evangelios dijo TE AMO , a nadie, ¿por que? Simplemente por que él no necesito decirlo, el mismo era la expresión más dulce del verdadero amor en cada una de sus acciones.
El evangelio de Juan dice: "Si me amáis, guardad mis mandamientos. (Juan 14:15), esto solo explica que el amor no es una palabra simplemente, o un básico sentimiento, sino una clara decisión que termina en una acción, el OBEDECER LOS MANDAMIENTOS DE DIOS.
¿Cuando una mala racha o un gran problema nos ayudaran a bien? pues simplemente cuando tu y yo, amemos a Dios entrañablemente, y cuando ese amor se demuestre obedeciendo sus mandamientos.
Muchas veces en medio de los problemas, nuestra reacción es ¿por que a mi Señor?, pero si nosotros obedeciésemos sus mandamientos sin cuestionarlos, quizás nuestra reacción sería ¿Señor hágase tu voluntad?.
En ninguno de los evangelios vemos a un Jesús quejumbroso, en ninguna epístola vemos a un apóstol quejándose por las persecuciones, y si el mismo hijo de Dios (figura a la cual estamos llamados a llegar)no se quejo nunca con el Padre, ¿por que nosotros nos quejamos ante Dios por hacer su voluntad?.En Cristo nunca vimos un ¡¡¡No Padre, eso si que no lo are, lo que quieras, pero a la Cruz nunca!!!.
Sin embargo vemos a Cristo sometiéndose a la perfecta voluntad de su Padre por amor, por amor a cumplir sus mandatos y por amor a su creación, diciendo, Padre, hágase tu voluntad y no la mía.
Muchos de los problemas que hoy los titulamos como pruebas, no son otra cosa que la suma y constante desobediencia a los mandatos de Dios, los prestamos usureros que hasta hoy estamos pagando por no esperar el tiempo de Dios para obtener un bien necesario, los malos matrimonios por no cumplir los preceptos escritúrales dejados por Dios para el matrimonio, tales como “el yugo desigual”, los hijos rebeldes y desobedientes por no haber sidos corregidos a tiempo con vara, tal y como la biblia lo dice, en fin, la lista seria interminable.
Todo esto no ocurriría si se amara a Dios de verdad y no tan solo de labios, y si ocurriera de todas maneras, sabríamos de antemano que es la estricta voluntad de Dios y que todo este gran problema que hoy nos agobia, terminara siendo una gran bendición ¿por que? Por que su palabra lo promete, que A LOS QUE AMAN A DIOS, TODAS LAS COSAS, LAS BUENAS Y LAS MUY MALAS, LES AYUDAN A BIEN.
Si tu amas a Dios, demuéstraselo, obedece sus mandamientos, escucha su voz, camina por donde el tiene una senda para ti, y aléjate del mal, solo así comprenderás que cuando algo imprevisto y malo te ocurra, será por que Dios solo quiere pobrar cuan sólido y firme esta tu amor hacia él.

Dios te bendiga,

Profeta de Dios