El gozo, producto de una debilidad

2ª Corintios 12:7-9 Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltara, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca; 8 respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor que lo quite de mí. 9 Y me ha dicho: "Bástate mi gracia, porque mi poder se perfecciona en la debilidad". Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.

Existe la creencia en todo el mundo, de que las debilidades son algo que los hombres debemos derrotar, como un enemigo acérrimo de la hombría, de hecho se nos enseña desde niño en casi todas las culturas, sobre todo en las latinoamericanas que los hombres no lloran, los hombres somos machos indestructibles, valientes, fuertes y jamás por ningún motivo ni circunstancias nos doblegaremos ante una debilidad y mucho menos por esa debilidad soltaremos una lagrima. Doy gracias a Dios que una de las pocas cosas buenas que ha traído el tiempo, es que, al menos en Chile, ese tabú de que los hombres no deben llorar ha comenzado a desaparecer, por que al igual que muchos conceptos que el mundo tiene respecto a la vida, son diabólicamente erróneos, la creencia de que los hombres no lloran a destruido el corazón (virtual y no virtualmente) y a bloqueado las emociones de muchos hombres en Chile, de hecho me tocó conocer el caso de un hombre, un buen hombre preocupado del sustento de su casa, un hombre rudo que tiene como profesión la soldadura, es un hombre de trabajo, luchador, esforzado, pero en una de las oportunidades que tuvimos junto a mi esposa de predicarle sobre Cristo, el nos confesó que nunca había llorado, que su padre le había dicho desde muy pequeño que los hombres no lloraban, y que si lo hacia entonces era un afeminado.
Que desgracia, ese hombre por causa de que su padre le había inculcado tan erróneo concepto sobre la hombría, el padecía de hipertensión por causa de que todas sus emociones estaban bloqueadas, así como también el había acompañado a su mujer y a sus hijos a la iglesia durante un tiempo, pero nunca había podido llorar delante de un altar ¿por qué? Pues por que los hombres no lloran ¿díganme si ese concepto no fue establecido por el diablo, así como todo el fundamento del machismo? ¡¡Que el Señor reprenda a ese vil ángel caído, por el daño que le ha hecho a esta humanidad!!

Pues bien, las debilidades son parte de la naturaleza humana, de hecho las debilidades de los hombres en cuanto a su fisionomía, han sido el gatillante de que busque reemplazar esas debilidades con artefactos, es así como fueron creados los zapatos por nuestra clara falta de pezuñas, como fue creada la vestimenta, ante la falta de pieles gruesas y peludas, y fue así como fueron creadas las armas para cazar, ante la falta de garras, en fin, las debilidades físicas en el humano son muchas en comparación con la naturaleza, por todo ello aún me pregunto como fue posible que el hombre haya podido sobrevivir en un ambiente tan hostil como fue en un comienzo la humanidad, la única respuesta es que Dios dotó al hombre de una inteligencia con la cual, a pesar de sus claras debilidades, puede ser hasta hoy el ser predominante por sobre toda la naturaleza animal o al menos lo es mientras los animales se mantengan a raya.

Las debilidades aún existen en el humano, pero no tan solo las físicas, sino por sobre todo las emocionales, el hombre es el ser (a mi punto de vista) más vulnerable de toda la creación, el hombre puede nacer en un ambiente machista, y sin haber nacido machista, a la edad donde comienza a razonar es el machismo lo que predomina en su escala de valores, o viceversa, un hombre puede ser perfectamente feminista e incluso volverse afeminado sin haber nacido así, por el solo hecho de que fue desde muy pequeño influenciado por un entorno afeminado. En fin, el hombre es por naturaleza influenciable, y eso es por causa de la fragilidad de su carácter ante las circunstancias que lo rodean, he sabido de casos donde hombres que fueron criados como hombres (varonilmente) que tenían muy en claro su tendencia sexual (heterosexuales), e incluso casados y con hijos, y sin embargo, por causa de la fragilidad natural del ser humano, a cierta edad se declaran homosexuales, ¿por qué? Pues por que el hombre es frágil por naturaleza, nace tan indefenso y vive en tanta indefensión hasta casi los 10 años de edad, y no tan solo físicamente, sino sobre todo emocionalmente. Un niño va ser lo que sus padres hagan de él (en un 99%), por ello proverbios 22:6 dice: Instruye al niño en su camino, y ni aun de viejo se apartará de él, esto es por que Dios conoce la fragilidad con la que lidia el ser humano, él sabe cuan influyente son los padres para un niño, y lo sabe muy bien, POR QUE FUE DIOS QUIÉN CREO AL HOMBRE CON DEBILIDADES.

El creer que las debilidades son nuestras enemigas es un estigma que debe salir del corazón de todo aquel que se llame hijo de Dios, por que fue Dios quien nos hizo así con debilidades y flaquezas, si bien el Señor en un comienzo de su creación quiso evitarle al hombre no tuviese la clase de fragilidades físicas y emocionales que hoy padecemos, no podemos negar que Dios nos hizo hombres y mujeres con fragilidad, a Adán lo creo con la necesidad de una compañera, y a Eva si Adán hubiese estado cuidándola mientras fue engañada por la serpiente, quizás otra historia se habría escrito. Eso denota la clara debilidad del hombre y su mujer, si no hubiesen tenido debilidades, claramente ninguno de ellos habría tropezado.

Ciertamente las debilidades traen problemas al ser humano, y muchas veces debemos rebuscárnoslas para poder superar esas debilidades que provienen de nuestra frágil humanidad, y si el hombre se conformará a que simplemente es frágil y débil, entonces la raza humana no habría avanzado tanto en tecnología y avances que hoy nos permiten suplir esas debilidades, de hecho la tecnología que hoy estoy usando para publicar este mensaje, me permite llegar a cientos de lugares al mismo tiempo (oficinas, casas, ciber, etc), cosa que de otra forma, por causa de mi humana fragilidad no me hubiera permitido hacer.

Las debilidades son parte de la vida y de la ya mencionada naturaleza que Dios creo en nosotros, ahora bien, entendiendo que fue Dios quien nos creo con debilidades, cabe preguntarse ¿por qué Dios nos creo así de frágiles? Pues la única respuesta que tengo es que él nos creo (al igual que a todo lo que existe) con la intrínsica necesidad de él. Eso explica el la aseveración de los sicólogos al decir que los hombres nacen con un vacio existencial, con una clara necesidad de identidad y de sentirse parte de algo y de alguien, pues ese “sicológico vacio” no tiene otra forma que el mismo rostro de Cristo Jesús, y esa clara “necesidad de identidad” es la necesidad de ser llamado hijo de Dios, y ese ímpetu por “sentirse parte de algo”, es la necesidad de pertenecer al cuerpo de Cristo, sin embargo, el hombre guiado por el diablo, en vez de buscar la solución a esa fragilidad con la que fue creado, busca llenarse con todo lo que el mismo ha creado, y se niega rotundamente a llenar esos vacios que Dios llena con la otra parte del rompecabezas que el mismo creo para que fuésemos completos. Es así como nacen los grupos de distinta índole, ya sean políticos, tribus urbanas, clubes deportivos, etc. con el fin de llenar con un ídolo (o mártir) ese vacio, y con el grupo llenar la necesidad de ser parte del cuerpo de Cristo… ¡¡Que necio puede llegar a ser el hombre!! Habiendo un camino lleno de luz por donde caminar, aún así deciden amar más las tinieblas que la luz (Juan 3:19).

Dios nos creo con todas y cada una de nuestras fortalezas y debilidades por que es así como le servimos a él, con nuestra fuerza avanzamos y ayudamos a otros en sus debilidades, y con nuestras debilidades nos arrimamos a su amor y permitimos que otros nos ayuden a enfrentarlas, Dios no se equivoca estimado hermano, si eres frágil donde yo soy fuerte, es por que tu y yo debemos ser parte de un mismo cuerpo, y si ambos somos débiles en lo mismo, tenemos a un Dios que es EN TODO INIMAGINABLEMENTE FUERTE ¡¡ALELUYA!!.

El apóstol pablo tuvo que aprender, al igual que cualquier otro ser humano, que su debilidad no era otra cosa que parte de la fortaleza que Dios formaba en él. El clamo, lloró, oró, suplicó, rogó e imploró que esa vergonzosa y demoniaca espina le fuese quitada, sin embargo, solo obtuvo de vuelta de su clamor, un claro y doloroso ¡¡NO!!

Muchos han discutido sobre el misterioso aguijón del apóstol Pablo, unos lo han atribuido a una enfermedad física, otros a persecuciones, otros a que abandonó a su supuesta esposa, en fin, cada uno a sacado su propia conclusión, pero lo importante no es ¡¡que era!! lo que azotaba al apóstol, sino que fuera lo que fuera para él ERA UNA DEBILIDAD, y una tan vergonzosa que le era permitido a Satanás abofetearle en eso, y cuando se menciona abofetear, lo hace de la misma manera en que se abofeteaba a un esclavo de parte de su amo, con el fin de avergonzarle, esto quiere decir que su padecimiento, primero era un aguijón que le punzaba con dolor el corazón, y segundo era totalmente vergonzoso para él padecerlo. Es que Dios sabe que le da a cada cual, y claramente el apóstol recibió tales revelaciones de parte del Dios vivo, que le iba a ser imposible en algún momento (gracias a esta asquerosa carnalidad que nos agobia) no jactarse de lo otorgado por Dios, en definitiva el Señor quería que su amado apóstol a los gentiles conservara intacta la pureza de su humildad, Dios permitió que Satanás azotase al gran apóstol Pablo, por amor a Pablo.


Que incoherente para la limitada mente humana, permitir que algo al parecer malo, perverso e incluso satánico proviniese de la estricta voluntad de aquel que nos sacó de las tinieblas demoniacas a su luz admirable, pero si algo nadie puede negar, es que Dios es amor y rico en sabiduría, y si a él le parecía correcto que un demonio atormentara a Pablo en su debilidad, pues era nada menos lo mejor que le podía al apóstol en la vida.

Pablo, al igual que todos nosotros era ser humano, el tenia una admirable y sanamente envidiable fortaleza para resistir los tormentos que le conferían los enemigos del evangelio, el jamás dio pies atrás respecto de alguna misión que su Dios le encomendó, sin embargo, con todo y fortalezas, era débil, frágil y mortal, al igual que cada uno de los que leemos este mensaje, el no era mejor en su humanidad que nosotros, con todo y apóstol misionero, era un hombre de carne y hueso, uno que volvió al polvo de donde fue tomado. ¿Le quita merito a Pablo su debilidad? Claro que no, ¿y por que no? Por que a pesar de lo doloroso y vergonzoso que fue para él esa debilidad, el comprendió que le fue otorgada no por alguna maquinación del diablo que se le haya escapado a Dios, sino por todo lo contrario, fue Dios quien ordeno al diablo que azotase a Pablo con un propósito, PERFECCIONAR SU PODER EN LA DEBILIDAD DEL HOMBRE.
El apóstol comprendió la fortaleza que había escondida en su propia debilidad, cuando por tercera vez Dios le declara que no le será quitado su aguijón, por que es ese mismo emisario del diablo usado por Dios, quién permitirá que en esa debilidad el apóstol Pablo APRENDA A GLORIFICAR A DIOS.

El poder del Dios todopoderoso se perfecciona en el lugar donde el hombre admite que su debilidad.
Los hombres hemos sido enseñados por el diablo, el nos educa en las escuelas y en las universidades y nos enseña a resolver nuestros problemas con nuestras propias fuerzas, cuando es Dios quién quiere hacerse cargo de nuestras carencias, no a través de nuestra flojera, sino de nuestra clara entrega en fe y confianza a Dios.
Debemos dejar que Dios nos diga como al Apóstol, ¡¡Juan, Pedro, Patricia, Eva, etc, No te quitaré esa debilidad, no te quitare esa tentación, no te quitare esa lucha, más bien seré yo quien la venza por ti y en ti, pero solo lo hare cuando comprendas que tu debilidad es tan solo una hermosa oportunidad que te doy para que glorifiques mi nombre!!

Que deliciosa es la sabiduría de Dios, que precioso y esplendorosos son sus caminos, como él nos muestra que aún nuestra lógica más razonable es ridícula delante de su inteligencia, es que ha nadie en toda la humanidad se le puede ocurrir que esa odiosa tentación o debilidad física puede ser una oportunidad para glorificar a Dios, todos nosotros esperamos estar sanos para adorar a Dios, esperamos vencer nuestras luchas pruebas y tentaciones con nuestras fuerzas para llevarlas como botín de guerra a los pies de su trono, sin embargo, su inescrutable sabiduría nos dice una vez más que nuestra razón se cae ridículamente delante de su gracia, por que es su gracia lo que nos mantiene en pie, es su amor, su fuerza y no la nuestra, es su poder sobre nuestra debilidad la victoria que necesitamos, no nuestra propia victoria, sino su victoria, su gracia y su sangre cubriendo con poder y autoridad cada una de nuestras falencias.

No estoy diciendo con esto que su gracia cubre nuestra maldad no arrepentida, sino digo que su dulce y preciosa gracia cubre aquello con lo cual hasta hoy e luchado con ahincó, con fuerza, coraje y sin transar, y así y todo no lo he podido vencer, para eso ESTÁ LA GRACIA.

Finalmente el apóstol comprendió esta preciosa verdad, y lo podemos ver al culminar el versículo 9, diciendo Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.
Es el poder de Cristo el que reposa en nosotros, cuando ya no nos jactamos de lo que hemos podido lograr para Dios, sino cuando nuestra jactancia es Dios obrando en nuestra debilidad. ¡¡Que lección de humildad!!

Oración: Amado Dios, te pido perdón por todas las veces en que me he jactado de las victorias que he obtenido para ti, olvidándome de que has sido tu quien ha obtenido la victoria para mi, por que no es con mi espada, no es con mi ejercito, no es con mi fuerza, todo lo que hasta hoy “he logrado” en ti, ha sido tu Santo Espíritu quién lo ha logrado en mi. Te amo Jesús, y reconozco que soy un hombre lleno de debilidades, frágil y 100% tentable, pero me gozo ya no en mi fortaleza, sino en todas aquellas debilidades donde has sido tu el único fiel quien me ha guardado sin caída. Gracias Dios por mis debilidades, por que hoy he comprendido que son todas y cada una de ellas, nada menos que una hermosa posibilidad que me has dado para adorarte. En tu nombre Jesús, amen.


Dios te bendiga,

Profeta de Dios.